Solté las cargas de mi pasado,
me quite los grilletes y extendí las
alas,
deje que el viento soplara a mi favor,
y volé hasta donde habita la magia.
Dibuje con mi mente siluetas de
felicidad en el aire,
sentí por fin la ansiada paz que
buscaba,
cabalgue sin miedo la estrellada noche,
y me deslice por un rayo de luz de la
madrugada.
Me deje acompañar por mis miedos,
los lleve escritos y encerrados en una
caja,
para lanzarlos al pozo profundo del
olvido,
y así liberal de pesadas cadenas mi
alma.
Estrene de nuevo una sonrisa en mi
cara,
deje que la brisa de la vida me tocara,
volví a sentir que de nuevo nacía,
y me levante de la silla con lagrimas.
La soledad fue mi mejor compañera y
amiga,
dando rienda suelta a mis emociones
mientras bailaba,
un cantante cantaba una canción con
palabras de amor inmortal,
haciéndome volar mas allá de aquella
habitación, haciéndome sentir soñaba.
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