The Divan of the shadow
Vivir es amar el resto es silencio, vivir es nacer y soñar cada día.
sábado, 7 de diciembre de 2024
martes, 3 de diciembre de 2024
DESPUÉS DE LA TORMENTA
sábado, 30 de noviembre de 2024
SINTIENDO CADA LATIDO
No me dejes al borde del abismo,
Pues me dan mucho miedo las alturas,
Yo siempre he sido de andar el camino,
Y de contemplar despacio la luna.
Regálame otra vez tu mirada,
Y aguántame de nuevo el suspiro,
Esa sonrisa que se dibuja en tu cara,
Es todo lo que yo necesito,
Para volar contigo hasta las estrellas,
Sin alas, sintiendo cada latido.
miércoles, 27 de noviembre de 2024
DE AQUELLUS PASUS (En Hurdano antiguo)
miércoles, 20 de noviembre de 2024
CUANTAS VECES HE DE ARRODILLARME Y REZAR
No estamos en los principios, ni en los finales,
aquí sentados en nuestra nube observando el tiempo,
y ese reloj que mueve sus agujas sin piedad,
cada segundo pasa en un goteo imparable hacia el olvido,
y los segundos van clavando en la tierra sus garras como buitres alados,
Llevándose la esperanza y dejando el hoy con dolor.
Hoy como ayer el pez grande se come al pequeño,
y cuantas veces he de arrodillarme y rezar para que algo cambie,
el sol de esta mañana llega con retraso,
el llanto de la desesperación recorre las calles,
a lo lejos siguen sonando las sirenas y se oyen gritos de dolor,
mientras en cada rincón se percibe el olor a muerte.
La vida ya no tiene valor para algunos,
todo pasa a ser un negocio, de armas, de petróleo,
la muerte se ha instalado en el alma de los hombres,
y el demonio vuelve a recorrer la tierra sin que nadie haga algo,
mientras miles de inocentes mueren segados por la guadaña,
víctimas del odio, el fanatismo y la sin razón.
Los hombres destruyen a los hombres,
Llevándose por delante todo a su paso,
sin distinción de ancianos, niños y mujeres,
todo da igual, ya nada importa a los que manejan los hilos,
nos les importa mirar para otro lado sin escrúpulos,
la tierra les pertenece, y la vida de otras personas les es indiferente.
Malditas guerras y malditos aquellos,
que coleccionan almas asesinadas por hacerse más ricos,
malditas guerras y malditos aquellos,
que entierran la paz en fosas comunes de miles de inocentes,
que lo único que quieren es vivir en paz su vida,
y tener un trozo de pan cada día que llevarse a la boca.
No estamos en los principios, ni en los finales,
aquí sentados en nuestra nube observando el tiempo,
y ese reloj que mueve sus agujas sin piedad,
cada segundo pasa en un goteo imparable hacia el olvido,
y los segundos van clavando en la tierra sus garras como buitres alados,
Llevándose la esperanza y dejando el hoy con dolor.
Cuantos más han de morir,
para que los señores que mandan sacien su sed de sangre.