Estoy buscando en el baúl de mis
recuerdos,
el punto que me falta sobre la letra I,
la canción que un día escribí
pensando en el amor,
el deseo que guarde un mes antes de
abrir,
el ultimo beso loco, a destiempo y
furtivo,
que a una amiga un día la robe sin
pedir.
Estoy buscando en el baúl de mis
recuerdos,
la niñez que deje atrás con el
tiempo,
las risas de felicidad locas e
incontroladas,
las tardes de otoño, verano e
invierno,
y las flores marchitas de mis 46
primaveras.
Estoy buscando en el baúl de mis
recuerdos,
los abrazos que muchos días me dieron,
el olor a tierra mojada y flores del
campo,
las noches de luna llena con estrellas,
el baño en el rio de mi pueblo
desnudo,
y el calor de los besos frente a una
hoguera.
Estoy buscando en el baúl de mis
recuerdos,
cada hora, cada minuto y cada segundo
de mi tiempo,
mi viejo reloj, mi viejo patinete y mi
vieja bicicleta,
mi tardes pasadas jugando con los
amigos,
y la merienda con amor en casa de mi
abuela.
Estoy buscando en el baúl de mis
recuerdos,
todas las promesas cumplidas y los
sueños dormidos,
todos los corazones que escribieron mi
historia,
todas las lagrimas que derrame por
felicidad y dolor,
y todas las cosas bellas que caben en
mi memoria.
Estoy buscando en el baúl de mis
recuerdos,
unas alas blancas para volar hasta el
cielo,
una chistera, una madriguera y un
conejo,
un diván donde descansa cada día una
sombra,
un soldado de plomo, un barco de papel
y un costurero,
todo lo que soñé y todo lo que sueñan
cada día mis sueños.
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